Poco a poco te has adentrado en mi corazón con cada detalle, con cada sonrisa, con cada lágrima, beso, palabra o gesto. CREO que has llegado a conocerme un poco mejor de lo que yo misma, CREO también que sabes en que CREO pero CREO que de todos modos te diré que CREO EN:
La mujer que me dio la vida, MI MADRE, como ejemplo del valor, coraje, inteligencia, belleza e inmensa capacidad de amar de la mujer y en especial de la mujer venezolana.
MI HERMANA porque además de compartir nuestra sangre y nuestro apellido, hemos sabido hacer de esos lazos impuestos una verdadera amistad y compartir nuestros gustos, problemas, alegrías, compañía, sueños y muchas otras cosas más.
MI PAÍS, ese que de pequeña imaginaba como un elefante o una danta, como el más hermoso y completo del planeta tierra, con montañas nevadas que se bañan en las hermosas playas que cubren medanos en los cuales nacen bosques y selvas majestuosas y donde grandes tepuyes enmarcan los llanos.
LOS NIÑOS por ser los seres más puros y darnos cada día con su sinceridad, ternura, alegría y sencillez el ejemplo de lo que fuimos y nunca debimos dejar de ser.
LAS DIFERENCIAS, ya que sería muy aburrido comer siempre un helado del mismo sabor, ver los mismos tonos en un atardecer o que tú fueras igual a cualquier otro que pudiera escoger, ya que no podría justificar que te quiero porque eres único. Es por esto que creo en el balance y en el respeto por los demás.
LAS PERSONAS ESPECIALES, los impedidos, los que tienen alguna carencia física que día a día me enseñan lo que es ser feliz, hacerse importante a pesar de las circunstancias y a quitarme los impedimentos innecesarios para vivir.
EL MAR, que me calma con su sonido y movimiento, que me baña con sus aguas, que me calienta con sus arenas, que me hace a veces imaginarme que soy un pez, que nací de él y que puedo vivir en el eternamente.
LOS GATOS, los perros, las tortugas y los delfines, en los tulipanes, las orquídeas y en la naturaleza en general.
EL AMOR y la pasión como las fuerzas que mueven el mundo y que –por supuesto- me mueven a mí.
DIOS, pero no en el que castiga si no vas a misa un domingo, si no rezas un padre nuestro, si comes carne en semana santa o que juzga tu vida sexual, sino en esa fuerza superior que nos hizo tan perfectos, que me regaló todo eso en lo que creo y que me permite hacerme feliz y vivir cada día como el último, como el más bello de mi vida.
Por último, de unos meses hacia acá, mi corazón me dice que crea EN TI, mi compañero, mi amigo, mi apoyo, la razón de mis alegrías diarias esa persona con quien creo que podría estar el resto de mis días…
Chauu!
Que lindo leer esto despuès de aquella primera vez! Y como aquella primera vez me emociona tanto y me llena de felicidad. Gracias por todo tu amor y por hacerme siempre el hombre más feliz del mundo. Te amo mucho mi cielito! :)
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